Quilmes volvió a la victoria en el Día del Hincha de Quilmes, una jornada cargada de emociones que terminó con un ajustado pero valioso triunfo por 1-0 sobre Agropecuario. El único gol del partido, un cabezazo fulminante de Juan Ignacio Capano, bastó para darle a Quilmes tres puntos cruciales en su lucha por mantenerse en la zona de clasificación al Reducido de la Zona A de la Primera Nacional.

El festejo, sin embargo, estuvo teñido de un dejo de amargura. La alegría del triunfo llegó apenas horas después que se conociera la sentencia desfavorable del Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS), en la que Quilmes fue condenado a pagar 900 mil dólares al club chileno Unión La Calera por el caso del arquero Lucas Giovini. Una noticia que cayó como un balde de agua fría entre los hinchas y la dirigencia, ensombreciendo una fecha que se suponía de puro festejo.

A pesar de las adversidades, el equipo dirigido por Sergio Rondina mostró una vez más su carácter. Luego de dos partidos sin ganar en casa, el Cervecero volvió a sonreír ante su gente, alcanzando los 41 puntos y ubicándose en el cuarto puesto de la tabla, en plena zona de clasificación al Reducido. Los festejos comenzaron temprano en las calles de Quilmes y culminaron en el estadio, donde los hinchas celebraron el triunfo. 

El encuentro no comenzó de la mejor manera para los de Rondina, con algunas dudas en los primeros minutos. Sin embargo, el gol de Capano trajo la calma que el equipo necesitaba para asentarse en el campo y manejar los tiempos del partido. Por el otro lado, Agropecuario, bajo la dirección del histórico Pablo Vicó, no supo aprovechar sus oportunidades y dejó pasar la chance de acercarse a los puestos de ascenso.

A 63 años del histórico 19 de agosto de 1961, cuando los hinchas de Quilmes llenaron de papelitos por primera vez una cancha de fútbol argentino, el equipo respondió al llamado de su gente. No fue un partido para el recuerdo por su brillo, pero sí por la actitud, esa misma que los hinchas reclamaban tras la caída ante San Martín de San Juan. Quilmes, una vez más, demostró que en los momentos difíciles, sabe encontrar la forma de levantarse y seguir adelante, ilusionando a su gente con la esperanza de un futuro mejor.