
La cancelación de dos proyectos claves afecta a miles de usuarios del conurbano sur y genera preocupación por el abandono en la inversión ferroviaria.
En una decisión que encendió alarmas entre vecinos, vecinas, organizaciones sociales y usuarios del ferrocarril, Trenes Argentinos Infraestructura (ADIF) confirmó la cancelación definitiva de las obras para las nuevas estaciones Héroes de Malvinas y Universidad de Almirante Brown, ambas previstas sobre el ramal Constitución-La Plata de la Línea Roca.
Los proyectos, impulsados a fines de 2021 y con un avance significativo hasta principios de 2023, habían sido pensados para mejorar la conectividad en dos de los municipios más poblados del conurbano bonaerense. En el caso de Héroes de Malvinas, la estación apuntaba a reducir la distancia de más de 4 kilómetros entre las actuales estaciones Quilmes y Ezpeleta, beneficiando a más de 17.000 pasajeros diarios.
Además de su función estratégica en términos de movilidad, la estación Héroes de Malvinas representaba un hito simbólico para la comunidad: su nombre fue elegido tras un proceso participativo que contó con un fuerte involucramiento del Centro de Veteranos de Guerra de Quilmes, vecinos, vecinas y organizaciones sociales. La propuesta fue acompañada por el Municipio de Quilmes, que promovió la iniciativa para rendir homenaje a los ex combatientes y reafirmar el compromiso con la memoria colectiva.
Por su parte, la estación Universidad de Almirante Brown buscaba integrar directamente el servicio ferroviario con el polo educativo de esa localidad, facilitando el acceso de miles de estudiantes y docentes.
Ambas obras ya contaban con gran parte de su infraestructura principal ejecutada: andenes elevados, accesos adaptados para personas con movilidad reducida, iluminación LED, boleterías, locales comerciales y pasos peatonales subterráneos.
Sin embargo, la gestión actual resolvió dar de baja los contratos con las empresas constructoras (UTE Pose-Induvía y UTE Ferromel-Herso), bajo el argumento que no forman parte del “plan de prioridades” en el marco de la emergencia ferroviaria.
La decisión no solo frustra una mejora clave en la calidad del servicio, sino que también implica un desperdicio de recursos públicos ya invertidos, además de un impacto directo en la vida cotidiana de miles de usuarios. El desmantelamiento de estas iniciativas se enmarca en una política más amplia de recorte y congelamiento de obras en el sistema ferroviario, priorizando únicamente cuestiones vinculadas a la seguridad operativa inmediata.
Desde diversos sectores políticos, gremiales y vecinales se manifestaron en contra de esta medida, exigiendo una revisión urgente de la decisión y reclamando la reactivación de las obras. La falta de planificación a largo plazo y la escasa transparencia en los criterios de priorización generan un creciente malestar en la comunidad.
La movilidad, el acceso al transporte público y el desarrollo urbano planificado son pilares fundamentales del derecho a la ciudad. Cancelar proyectos estratégicos sin ofrecer alternativas claras es una señal de retroceso que, lejos de resolver problemas, los profundiza.